Reza un viejo dicho militar que se le decía a los soldados antes de la jura de bandera lo siguiente: la bandera es el orgullo que simboliza la PATRIA, cuando beses la bandera, estarás besando a ESPAÑA.

Pues bien me hace mucha gracia como en esta nuestra nación, se está olvidando esto, ya fuera de que se halla hecho el servicio militar obligatorio o no, se está perdiendo a pasos agigantados la noción de patria y de orgullo por la misma. A cualquier persona por le hecho de llevar la rojigualda en un polo, o un jersey que no sea de la selección se la tilda de fascista o “facha” como más les gusta llamar a los pocos patriotas de esta nación.

Bien es sabido que esta particular “banderofobia” a hecho que separatistas de todos los rincones de España quemen banderas sin ningún castigo, y conocido es de sobras la frase que dijo Otegui cuando ardía la enseña nacional en un mitin de Batasuna, “Que mal huele la bandera española”.

Me hace gracia, pero que mucha gracia toda esta chusma supuestamente marxista, separatista y anticapitalista que tanto se queja de EE.UU. y su imperialismo pero no hacen más que quejarse por lo mal que se porta España con ellos.

Saben que les digo caballeros que me quede parado al ver como desde un balcón de mi ciudad se veía bien clara la bandera americana. Eso es orgullo señores y no lo que tenemos aquí, es un país que podrá tener todos los fallos que quiera, y ser odiado a más no poder, pero patriotismo y orgullo no les falta. Donde quiera que vayan, ahí está presente su enseña nacional. Pero todo esto no son alabanzas a un país imperialista, no ni mucho menos sino quejas. Quejas por estos supuestos antisistema y anticapitalistas, que tanto se quejan tan rebeldes son y tanto odian a EE.UU. pero no parece que les molesta más una bandera de España que una extranjera…

Este es el país en el que nos ha tocado vivir, ciertamente antes estábamos orgullosos de lo que éramos pero hoy día solo unos pocos lo sentimos de veras. Pero tenemos demasiados enemigos, y la lucha es difícil. PERO COMO NO ME CANSO DE REPETIR, HAY QUE RESISTIR LOS ENVITES, Y NO DECAER EN EL ESFUERZO SOLO ASÍ PODREMOS CONTAR CON LA CERTEZA DE LA VICTORIA, UNA VICTORIA MORAL Y POLÍTICA.